"Cuando el país comienza a mostrar señales de recuperación, nuevamente un sector intenta hacer que las cosas no cambien", fustigó el Jefe de Estado desde Iquique.
Garantizó, sin embargo, que su Administración "no caerá en ningún caso en el inmovilismo" y buscará "el camino para habilitar un debate serio en el Parlamento y así la reforma tributaria que Chile necesita pueda ser realidad".
El Presidente Gabriel Boric defendió esta noche que la reforma tributaria presentada por el Ejecutivo "era buena para Chile", aseguró que su rechazo este miércoles en el Congreso es "un golpe a la esperanza" propinado por un sector que pareciera tener el objetivo de "pegarle al Gobierno e impedir los cambios" y prometió ocupar todo su liderazgo "para construir una mayoría" para llevar adelante su programa de transformaciones.
"El día de hoy la Cámara de Diputados ha rechazado la idea de legislar el proyecto de ley de reforma tributaria de nuestro Gobierno. ¿Qué significa la idea de legislar? Se negaron a discutir la posibilidad de dar un debate en donde se supone debería ser el templo de la democracia y donde se deben debatir estas cosas por el bien común, que yo espero que compartamos", dijo esta noche el Mandatario en una rueda de prensa en la ciudad de Iquique, en el marco de su primera visita a la Región de Tarapacá.
"Debo ser sincero con ustedes, chilenos y chilenas: cuando el país comienza a mostrar señales de recuperación, cuando empezamos a salir adelante de una crisis larga, nuevamente un sector intenta hacer que las cosas no cambien, dejar las cosas tal cual como están. Pareciera que no aprendemos de las lecciones del pasado", fustigó el Jefe de Estado.
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